Así es... ya se está yendo el año, y como todos los años, los análisis y resúmenes están a la orden del día.
Veo las noticias y comentaban los sucesos del año, como la muerte de Pinochet, el accidente del bus con militares en Cañete, las platas perdidas de Chiledeportes, y así tantas otras cosas.
¿Les pasa que en esta época del año comienzan a hacer sus balances, analizar lo bueno y lo malo del año?
Pues en eso estoy yo, analizando lo que hice este año, sacando experiencia (si es que se puede) de las cosas malas, para tratar de no cometer los mismos errores, y viendo si las cosas buenas dan para decir que fue un buen año...
A veces esta tarea no se me hace muy agradable, por que lamentablemente, estos últimos años mis balances han tendido más hacia decir que no fue un buen año, pero tampoco llego a decir que fue malo, solo no tan bueno como me lo esperaba.
Quizá me queda algo de optimismo en el fondo, al no decir de plano que he tenido años malos, si no "no tan buenos como esperaba". Claro, si digo que el vaso está solo un poquito lleno en lugar de casi vacío es ser optimista... o simplemente trato de autoconvencerme.
Prefiero declararme optimista.
Al final, ¿que me queda? Analizo y analizo, y resuelvo que las cosas que han salido mal, que diablos... salieron así no más, a la cresta. Las que resultaron bien, excelente que haya sido así, y disfruto recordándolas. Y las cosas que quedaron pendientes, pues tendré que ponerle más empeño para que resulten no más...
¿Será eso suficiente? Bueno, por el momento, para mi, creo que si.
Ya... se me está secando la cratividad, y tengo cosas que hacer, así que me despido.
Espero que sus balances sean positivos, y que los venideros, también.
Se cuidan, y gracias a los pocos que pasan por estos lados.
jueves, 21 de diciembre de 2006
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