martes, 15 de agosto de 2006

Hay un dicho...

que dice "no hay plazo que no se cumpla, ni deuda que no se pague".

La verdad es que personalmente no estoy convencido de que todas las deudas se paguen, pero si de que los plazos se cumplen, si o si...

Cuando mi hermano me dijo "vuelvo en dos meses más a casarme", yo pensé "ok, dos meses... 60 días... falta caleta", pero creo que no dimensioné lo rápido que pasa el tiempo a veces... sin darme cuenta cómo, el plazo se fue acercando más y más rápido, hasta que, casi sin advertecia, se dejó caer el día en que mi hermano volvía de Colombia a cumplir lo prometido.

El mismo día que mi bro llegó a Chile partimos a Victoria, la ciudad elegida sede para el evento, para que él viera a la novia, y ambos coordinaran y afinaran los últimos detalles que pudieran todavía quedar en el aire... fueron dos días que ni ví como pasaron volando, y en que tampoco los vi mucho a ellos... parece que organizar una boda es su resto de pega.

Y así llegó el día D, la fecha indicada... el plazo que se cumplía el 4 de Agosto. Ese día llegamos casi justo a la hora fijada al civil (somos chilenos, ok?), y a pesar de que los tortolitos se veían algo nerviosos, más nerviosos (y ruidosos) estabamos los familiares... quizá por eso nos hicieron entrar a la sala de ceremonias, donde se iba a celebrar el contrato, pero los chiquillos se quedaron afuera firmando no se qué papeles. Como yo no soy de estar mucho tiempo en una parte, salí a ver que pasaba, justo a tiempo para verlos dirigirse a la sala... Se veían tiernuchos, con una mezcla de ansiedad y nerviosismo y una tremenda sonrisa en la cara de cada uno. Cuando iban a entrar a la sala, conversaron un poquito, se dieron un beso y un abrazo (me imagino que para darse ánimo, y confianza), se tomaron la mano e ingresaron.

Adentro los esperaban peligros inimaginables... no, sorry, eso es de otro relato... adentro los esperaban los familiares, y la jueza (o vocal de mesa o como se le llame) listos y dispuestos para el show. Hago un aro acá para indicar lo pesada que era la señora... yo me imagino que si vas a estar haciendo ese tipo de ceremonias todo el tiempo, puede volverse monótono, pero tampoco es para ponerse densa. Imaginense que me dijo "o saca las fotos de este lado, o no saca fotos", a lo que yo respondí "ok", aunque por dentro me acordé de un par de cosas más...

Bueno, retomo la historia... la ceremonia fue interesante, ya que creo que nunca le habia puesto atención a lo que dice quien preside, con respecto al matrimonio, los derechos y deberes de cada uno, y etc, etc, etc. Lamento mi mala memoria, porque estoy seguro que hubo un par de cosas que me parecieron interesantes y me gustaría recordar ahora, pero ya fue... Me gustaría recordar también por qué cosa la Dany trataba de aguantarse la risa, al igual que yo, que creo también me estaba riendo, por la mirada que me dió mi hermano :D

Y finalmente, el momento de las firmas, de los contrayentes y los testigos, y las palabras al cierre de la señora jueza, y listo... ¡YA ESTAN CASADOS!. No recuerdo si preguntó en algún momento si alguien se oponía al matrimonio, aunque dudo que alguien se opusiera... sé que en la iglesia no lo dicen, asi que quería ver si solo lo dicen en las peliculas o de verdad lo preguntan... bueno, para el proximo matrimonio pondré más atención.

Afuera se tomaron unas cuantas fotos más, les hicieron las típicas bromas, y esas cosas, pero en el fondo, solo habia amor y felicidad en el aire. Yo no recordaba haber visto a mi hermano tan contento en mucho tiempo... si hasta se puso a tontear, creo que era pura felicidad en ese momento... la foto habla por si sola, ¿no?

Después nos fuimos a la casa de mis padrinos, a compartir con los recién matrimoniados, y familiares de ambos lados. A estas alturas mi abuelo ya había partido raudo y velóz (como es él) de vuelta a Concepción... fue bastante retenerlo dos días fuera de la casa, de donde no sale ni bajo amenaza de tsunami :D
Creo que fue bueno no haberle traido la bicicleta, o era capaz de volverse pedaleando a Conce.

Estuvo bien entretenida esa reunión post-matrimonio, sobre todo cuando empezaron a contar cada uno sus historias... pero la idea central de este relato son los dos jovenes que continúan escribiendo su historia juntos, ahora con un paso más... ¿cuantos por venir? Me imagino que ni ellos lo saben... si no me creen, miren la cara con que miraban la libreta de matrimonio :D

Luego escribiré acerca de la boda en la iglesia, pero no creo q sea pronto.


Ya se los he dicho un montón de veces, pero creo que no está de más repetirles a estos dos monos cuanto los quiero, y cuanto espero que sean felices.


Salud, por los plazos que se cumplen :)

4 comentarios:

Carola Fuenzalida Leal dijo...

TITO!!!

Cuando me case, si es que me caso, serás el encargado de las memorias de tan magno evento, que Cosas o Caras, yo quiero que Tito me inmortalice jejejej...
No creo que el matrimonio de tu hermano pudiera ser relatado de mejor manera, tienes style!!

Descuida que en mi próximo "advenimiento" nos veremos con la Pii... como antes snifisss!!!
Un beso

y fotos tuyas cuando??

Nindë Telemnar dijo...

ohhhh!!
yo tb me kero casar!!!

Mufita dijo...

Oh si.... amigo Tito no pierde su estilo para contar las cosas... y las fotos muy buenas.... ayudaron mucho a imaginarme eso momentos...

Felicidades a los tórtolos ...

Ciaoo nos vemos Titito

Tito dijo...

Hola Caro!
Gracias por darme la oportunidad de cubrir el evento (si es que llega a ocurrir, como tú dijiste) :D
Y espero que avises la proxima vez que te aparezcas por estas tierras

Hola Nindë, ¿arroz con leche, me quiero casar?

Hola Mufi, ¿cierto que tengo style? Que bueno que las fotos ayudaron a imaginarse todo... era la idea.

Nos vemos ;)